El 11 de septiembre de 2001, de repente, la situación de las mujeres afganas estalla a la luz del día. Todos los movimientos de mujeres condenaron los atentados, llamaron a la paz y se movilizaron para aumentar aún más la acción en favor de las mujeres de este país.
Grupos de mujeres resistentes, actuando en particular desde el Pakistán vecino, apoyaron desde el principio esta lucha. Los temas de la violencia y la condición social de las mujeres constituyen el núcleo de las acciones en este país.
En Nueva Zelanda la acción se concentró alrededor del proyecto NZEI Te Riu Roa, "Water to learn" (el agua para aprender) iniciado por el sindicato de maestros. Se trata de financiar el acceso al agua potable para una escuela o un centro infantil en el Pacífico. Si se eliminaba la responsabilidad de ir a buscar agua, las niñas podrían tener tiempo para ir a la escuela.
En Nueva-Caledonia, la Marcha permitió a las mujeres kanakas expresarse. |
Las mujeres de Nueva-Caledonia hicieron circular un manu (pedazo de tela) de color amarillo sol, que simbolizaba la palabra de las mujeres. Las actividades se prosiguieron en el año 2001 alrededor de cinco reivindicaciones: la creación de una casa de mujeres en cada comunidad, la generalización de las prestaciones familiares, la multiplicación de guarderías accesibles a todos, el desarrollo de una campaña de sensibilización sobre la igualdad de los sexos, así como la creación de comisiones para la condición femenina en las instituciones de la isla.
|
En el 2000, en Fiji, estalló un golpe de estado. Las mujeres concentraron sus esfuerzos en la colecta de firmas.
Finalmente, las actividades de las mujeres australianas fueron múltiples: festivales de música y de danza, picnics, autobús virtual sobre la violencia intrafamiliar. Se denunció la pobreza, llamando a un "comercio justo", al respeto de los derechos sindicales, a la desnuclearización del Pacífico, etc.
Forgot your password?
