La reforma del Código Civil turco que se realizó en noviembre de 2001 constituye una victoria para todo el movimiento feminista. Al reconocer la igualdad del hombre y de la mujer dentro de la pareja, el Parlamento turco cedió a las presiones que se ejercían desde hace numerosos años.
"Esta victoria es el resultado de al menos 10 años de lucha. Como Turquía ratificó en 1989 el Convenio para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación hacia las Mujeres-CEDAW-debía cambiar su código civil y esto se logró a pesar de la resistencia del gobierno nacionalista y conservador", indica una integrante de la Coordinación turca que participó en esta lucha.
En lo sucesivo el hombre ya no es el único jefe de familia. Se revisó profundamente el régimen de propiedad en el matrimonio: en caso de divorcio las mujeres recibirán la mitad de los bienes acumulados durante el matrimonio y no sólo los bienes que estén a su nombre. Sin embargo, una cláusula de último momento formulada por los partidos de oposición prevé que esta disposición no entrará en vigor hasta el año 2003.
Entre los otros cambios: la edad mínima para el matrimonio pasa a 18 años para los dos sexos (en contraste con 17 para los hombres y 15 para las mujeres anteriormente). Los hijos nacidos fuera del matrimonio podrán heredar de la misma manera que los hijos legítimos y a las personas solteras se les dará el derecho de adoptar.