Especial Washington y Nueva York
|
|
MUJERES QUE VIVEN EN ZONAS DE CONFLICTO
Nueva York, 17 octubre 2000
El 17 de octubre de 2000, seis mujeres provenientes de zonas de conflicto se dirigieron a la Sra. Fréchette, Vicesecretaria General, y a la Sra. King, asesora especial del Secretario General en cuestiones de genero.
Se trataba de:
-
1. Mathilde Kayitesi, de Ruanda;
2. Mayada Abassi, de Palestina;
3. Nazand Begikhani, de Kurdistán;
4. Fahima Vorgatts, de Afganistán;
5. Erika Papp, de Yugoslavia;
6. Marta Buritica, de Colombia.
1. Introducción - Mathilde Kayitesi, Ruanda (en francés)
Sra. Fréchette, distinguidos representantes de las Delegaciones Nacionales, amigos y amigas:
Soy Mathilde Kaytesi y vengo a hablarles de la terrible experiencia de Ruanda y la Subregión de los Grandes Lagos y de la incapacidad de la comunidad internacional en manejar conflictos, lo que acarreo el crimen más vil de la humanidad, el genocidio.
Nosotras, mujeres oriundas de los cuatro puntos cardinales, venimos como testigos vivientes de las miles de mujeres sometidas a violencias e injusticias causadas por los conflictos bélicos, y les agradecemos haber aceptado venir a escucharnos. Nuestros testimonios y reivindicaciones los hacemos en nombre de todas las mujeres que viven en situación de guerra.
Quisiera hablarles de los países africanos, que como tantos otros países del mundo, viven los impactos de la guerra, países como Angola, Burundi, Sierra Leona, la República Democrática del Congo, Liberia, Sudán, Etiopia y Eritrea. Debo enfatizar ante todo la importancia crucial de la aplicación inmediata des la resoluciones del Consejo de Seguridad, en particular aquellas que denuncian el comercio ilícito de armas y diamantes. El uso inmoral de armas y violencia, aunque legalmente permitido, intensifica aún más la continua explotación de nuestros pueblos y de nuestros recursos naturales de la cual se benefician las multinacionales de los países ricos.
Suplicamos a los países miembros que respeten sus compromisos conforme a la Carta de la Naciones Unidas, a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y las numerosas resoluciones de las cuales se han dotado las Naciones Unidas a lo largo de décadas de trabajos en sus asambleas. Quisiera ahora darle la palabra a la Sra. Mayada Abassi, de Palestina.
2. Sra. Mayada Abassi, Palestina
Señoras y señores, distinguidos representantes de los Estados del mundo:
Les vengo a hablar como mujer palestina cuyo pueblo está siendo objeto hoy, como lo ha sido en los últimos 52 años, de represión y de las más fundamentales violaciones de sus derechos. Deben ustedes poner fin inmediatamente al derramamiento de sangre de los palestinos causado por el ejercito y el gobierno de Israel. En dos semanas, han muerto102 palestinos, de los cuales 20 eran niños, y se cuentan más de 3000 personas heridas, entre las cuales se hallan docenas de niños que han perdido la vista.
El ejercito israelí utiliza armamento muy sofisticado - tanques blindados y mísiles lanzados a partir de helicópteros contra la población civil. Los pobladores armados atacan las aldeas y aterrorizan a sus habitantes.
Nos indigna profundamente el dizque proceso de paz que ignora los derechos fundamentales de los palestinos y fortalece todavía más al ocupante mediante la confiscación de nuestras tierras para la construcción de nuevos asentamientos, la destrucción de nuestros hogares, el encarcelamiento de nuestros hijos y esposos, y la toma de nuestros espacios sagrados.
Exigimos de las Naciones Unidas que utilice todos los medios a su disposición para obligar a Israel a respetar el derecho internacional y las resoluciones de la ONU respecto al pueblo palestino, de igual manera que se hace en el caso de otros Estados, para acabar con la impunidad con la cual Israel viola los derechos humanos fundamentales y legítimos de mi pueblo. Basta ya de aplicar una ley para unos y otra para otros, exigimos que la comunidad internacional garantice la seguridad del pueblo palestino. El ocupante debe retirarse de todos los territorios ocupados desde 1967, incluyendo Jerusalén Este.
Sólo una paz justa permitirá a los dos pueblos, el de Palestina y el de Israel, así como a todos los pueblos de la región vivir en paz y prosperar.
Les presento ahora a la Sra. Nazand Begikhani de Kurdistán
3. Sra. Nazand Begikhani de Kurdistan
Señora Fréchette, distinguidas delegaciones de las Naciones Unidas:
Soy una mujer del Kurdistan que les trae el mensaje de millones de mujeres privadas de sus derechos humanos los más fundamentales y de condición que viven en todos las partes de Kurdistan, resistiendo y luchando por un mundo mejor.
Las mujeres kurdas, como todas las mujeres que viven en tales condiciones, son objeto de discriminación racial, étnica, religiosa, social, económica y de género. Sufren a diario todo tipo de violencias: genocidio, destrucción masiva de aldeas y ciudades, encarcelamiento, deportación, asimilación forzada y violaciones por parte de los Estados-Naciones que gobiernan las diversas partes de Kurdistan. Deben, por lo demás, luchar contra la violencia familiar que se comete en nombre del honor familiar y que lleva a asesinato, mutilación y matrimonio forzoso y a temprana edad.
Esta realidad golpea a las mujeres que pertenecen a las minorías del mundo que son objeto de la violencia y discriminación más virulenta.
En su nombre y en solidaridad con ellas exigimos de las Naciones Unidas las medidas siguientes en las cuales las mujeres deben ser involucradas desde los primeros momentos:
1) tomar medidas inmediatas para poner fin a la guerra y a todas las formas de violencia en Kurdistan;
2) garantizar justicia, democracia, paz y respeto de las identidades humanas, culturales, lingüísticas y políticas.
3) ejercer presiones sobre los Estados que gobiernan sobre las diversas partes del Kurdistan con miras a:
a) ratificar e implementar sin reserva alguna todos los convenios y pactos en materia de derechos humanos,
b) suministrar suficientes recursos para la reconstrucción, compensar y disculparse por las pérdidas causadas por la guerra,
4) establecer mecanismos que permitan a las mujeres presentar denuncias contra cualquiera de los Estados que estén en violación de des convenios y protocolos internacionales y de las Naciones Unidas;
5) ejercer presiones para constituir y aplicar planes de acción para proyectos de desarrollo de la mujer y atribuir una parte del presupuesto contemplado en la Resolución 987 de la ONU a programas de mujeres, en particular a las viudas de Anfal y a las familias deportadas en el Kurdistan iraquí.
Le doy la palabra ahora a Fahima Vorgatts
4. Fahima Vorgatts, de Afganistán
La Sra. Vorgatts, con un gesto emocionante, se arranca el velo que le cubre el rostro y todos los presentes se levantaron para aplaudirla.
Los regímenes extremistas y las dictaduras son tierra fértil para el mutuo fortalecimiento del comercio de armas y los grandes intereses económicos. En ningún sitio es más evidente esta mezcla toxica y sus efectos devastadores sobre las mujeres que en Afganistán.
A las mujeres afganas, al igual que a las mujeres de Birmania, Argelia, Sudán e Irán, se les priva de sus derechos básicos. En Afganistán se les prohíbe acudir a los cuidados médicos más elementales, se les niega el acceso a la educación y la libertad de movimiento y están restringidas a condiciones de vida infrahumanas. En la calle, son abiertamente golpeadas, apedreadas y quemadas hasta morir. Soy aquí la voz de millones de mujeres afganas y de otros países de mundo que han sido abandonadas por las Naciones Unidas y sus Estados-miembros.
Exigimos
1. que cese inmediatamente todo el comercio y expedición de armas a Afganistán y a todo país que infrinja los derechos más fundamentales de su ciudadanía;
2. que se rehúse el reconocimiento político a regímenes extremistas e ilegítimos como e de los Talibanes;
3. que se haga comparecer ante la Corte Penal Internacional a todos los violadores de derechos humanos;
4. que se instrumenten medidas prácticas para la reinstauración de los derechos de las mujeres, los cuales son derechos humanos.
Cualquiera que pretenda defender la justicia, la paz, la igualdad y el desarrollo debe apoyar en el mundo entero la lucha de las mujeres contra los extremistas de todas tendencias y religiones.
La Sra. Erika Papp tomará ahora la palabra.
5. Sra. Erika Papp, de Yugoslavia
Represento a todas aquellas mujeres de Serbia y Vojvodina que, con gran valor, acaban de terminar la campaña preelectoral de las mujeres. Hablo también en nombre de todas las mujeres del mundo que luchan, con una esperanza inagotable y un gran compromiso, contra la represión y la pobreza,
En Serbia, nuestra campana movilizó a un gran número de mujeres e hizo una importante contribución a cambios profundamente deseados. Sin embargo, después de una década de guerras y sanciones, surgen claramente las lecciones aprendidas, lecciones que se pueden aplicar a todos los países en situaciones similares.
El aislamiento de un país por la comunidad internacional sólo logra fortalecer las dictaduras a ultranza.
Tales regímenes generan miedo, odio e intolerancia lo que lleva a conflictos multifacéticos y complejos propicios a los aprovechadores de las guerras, la economía de tipo mafioso, el comercio a gran escala de armas y el narcotráfico. Este trasfondo ce espantosas matanzas y genocidios.
En la mayoría de los casos, se encuentra en la comunidad internacional una resistencia a actuar y la actual estructura del Consejo de Seguridad es inmovilista, lo que podría contribuir a fortalecer el dominio absoluto de los dictadores.
No debe tolerarse la impunidad de los dictadores y se debe por lo tanto introducir un sistema de justicia que incluya reparaciones en vez de limitarse sólo a acusaciones. Se debe por consiguiente reinventar un verdadero concepto de democracia, una democracia que incluya la visión femenina de un orden mundial basado en el respeto y la seguridad humana. Este proceso debe incluir reformas vitales y la democratización del Consejo de Seguridad empezando con la eliminación del derecho de veto. Los grupos de mujeres deben asociarse efectivamente a todo el proceso.
Voy a invitar seguidamente a Marta Buritica, de Colombia quien concluirá nuestra presentación. .
6. Marta Buritica, de Colombia
Las mujeres de Colombia, las mujeres del mundo no quieren parir más hijos para la guerra.
Denunciamos la "doble moral" que conllevan las guerras en nuestros países, queremos develar la responsabilidad de los organismos y el sistema político internacional, las Naciones Unidas y su Consejo de Seguridad.
La doble moral, forma parte del silencio cómplice frente a la industria armamentista, una de las más rentables en los países desarrollados; un negocio global y productivo, pero también "inmoral" legitimado por el libre comercio. Así, la industria de la muerte viaja de país en país generando conflictos religiosos, étnicos y territoriales, políticos, para nutrirse de ellos.
Así, mientras se habla de Derechos Humanos se estimula la guerra, exacerbando los conflictos.
Frente a esta realidad, la ayuda humanitaria juega su papel; permitir que los pueblos no sucumban del todo ante la guerra e invocar una paz formal que permita mantenerla.
El tráfico ilegal de armas también forma parte del negocio articulado al narcotráfico, al mercado internacional de mujeres y menores para el comercio sexual.
Por lo tanto, las mujeres nos proponemos y proponemos de luchar por la destrucción de la industria armamentista y declaramos que no queremos parir más hijos para la guerra", que nuestros hijos e hijas no deseen tener un arma en sus juegos infantiles, que deseen tener una flauta, un azadón o un telescopio para dar rienda suelta a la creatividad e imaginación para soñar con un mundo libre, condiciones sobre las cuales será posible imaginarnos y construir nuestra dimensión de convivencia pacífica.
Las seis mujeres se ponen de pie y alzan sus manos enlazadas y gritan: NO MÁS GUERRAS. El público se pone de pie y une su voz a la de ellas para entonar el mayor deseo de todos.
En celebración del 85º aniversario de la WILPF (Liga Internacional de las Mujeres por la Paz y la Libertad) -"si quieres la paz, vive en paz y prepárate para ella".
[ Marcha hora por hora ]
[ Magazine ] [ Comunicados ]
Last modified 2006-03-23 03:07 PM
This item is available in
Français, English, Español