Especial Honduras: Rechazar el golpe y demandar la Asamblea Constituyente
Articulo sobre Honduras del Boletín de Enlace de la MMM - Septiembre 2009
Represión, persecución instalada contra las personas que hablan y
opinan abiertamente en contra el gobierno dictatorial. “Tenemos un
gobierno de facto empoderado y más dueño del país que nunca, tomando
decisiones arbitrarias, llamando a la gente a la discriminación de las
personas que nos encontramos en resistencia”, es lo que cuenta Lidice
Ortega, del Centro de Estudios de la Mujer de Honduras y del colectivo
Feministas en Resistencia, parte integrante del Frente Nacional de
Resistencia al golpe. ■ ■ ■
En el transcurso del encuentro de las Américas, ya se habían pasado 46 días del golpe, lo mismo tiempo de heroica resistencia. El Frente demanda de la solidaridad internacional una clara posición de bloqueo a los golpistas, además no apoyar la realización de elecciones que legitimarían a los que están infringiendo graves violaciones a los derechos humanos, especialmente por parte de los países de la Unión Europea y Estados Unidos, los más importantes aliados económicos de Honduras.
Lidice, integrante de la MMM en Honduras, relató en el encuentro la situación que vive el pueblo del país desde el golpe, que sucedió en el 28 de junio, cuando militares sacaran al presidente constitucionalmente electo Manuel Zelaya e instalaran en el poder el empresario y presidente de la Asamblea Nacional, Roberto Micheletti. Un golpe que ha sido planificado por un conyunto de actores (militares, empresarios, partidos políticos e iglesias).
Desde este entonces, seguidas manifestaciones pacíficas como marchas, toma de carreteras, paros y plantones frente a lugares estratégicos como la ONU, la OEA y diferentes instituciones del gobierno han sido utilizadas por la resistencia para denunciar a los golpistas. Todas esas manifestaciones fueron violentamente reprimidas por el ejército y la policía. Al mismo tiempo, vestidos de blanco, los golpistas organizan manifestaciones pro-golpe en las cuales obligan o pagan trabajadoras e trabajadores a participar.
Los golpistas también usan el control de prácticamente todos los medios de comunicación para generar un terrorismo ampliado contra la resistencia. “Los golpistas están llamando al silencio a la gente, le están diciendo que no debe opinar, que es un tema que se debe olvidar, que es un tema que ya está solucionado, que están las cosas como están. Y que es mejor no decir nada, porque la gente que está en la resistencia es muy violenta y que ya están tratando de matar a la gente que tiene una opinión contraria”, relata Lidice. Ella agrega que la estrategia mediática polariza el país y no hay opción para hablar en los medios. Hay persecución a liderazgos y medios de comunicación que han dado voz a los movimientos de oposición al golpe. “Se está matando a tanta gente, se está desapareciendo a tanta gente y por eso nos preocupa el fortalecimiento que tiene el gobierno golpista”.
Lidice alerta que el diálogo y la carta de San José, impulsados por los Estados Unidos, mediado por Costa Rica, no es la solución al golpe: “No creemos en eso. Estamos totalmente en contra. De alguna manera, le están pidiendo a Zelaya que renuncie a la Constituyente. Le están pidiendo que haga una componenda entre el gobierno golpista y el gabinete de Zelaya, lo cual no es posible. No se puede dejar ninguna persona de las que fueron nombradas por el gobierno golpistas, son parte de un gobierno ilegal que han usurpado”.
Por eso, la resistencia hondureña pide medidas más drásticas de organismos como la OEA, la ONU, el PNUD y todos los organismos internacionales de derechos: “en este momento están diciendo que hay un bloqueo, que no hay apoyo para Honduras, pero sabemos que tienen instaladas a personas apoyando el proceso electoral. Todavía hay mucho dinero que fluye de parte de ellos para organizar las elecciones. Unas elecciones que no se sabe en qué marco se van a dar. No podemos estar a medias tintas en este momento. Las medias tintas solamente dan más fuerza a los golpistas”. Lidice resaltó que “a estas alturas no se sabe si Zelaya va a regresar o no va regresar. A estas alturas todavía los escenarios son tan inciertos y tenemos tanto miedo porque en algún momento ellos no van a pensar demasiado para reprimir a las personas, porque ya las mismas personas en el país estamos en total conflicto, hay familias que tienen diferencias entre sí”.
Muchas participantes del encuentro relataran que, también en sus países, los medios simplemente ignoran el golpe de Estado en Honduras o descalifican a Zelaya y a la resistencia al tratar el golpe como una “crisis”. También garantizan espacio para divulgar argumentos que justifican el golpe (ya contestados en la práctica por juristas y activistas del movimiento nacional e internacional), ocultan las manifestaciones en contra el golpe y visibilizan aquellas personas en favor y, por fin, presionan por el “diálogo” a través del Acuerdo de San José. Eso demuestra que la estrategia del golpe tiene un alcance supranacional.
“Hacemos un llamado a toda la gente a solidarizarse con la resistencia en Honduras, porque en este momento somos nosotras y somos el país Honduras los que sufrimos un golpe de Estado, pero no sabemos si se está preparando otro golpe de Estado en otro lugar y sobre todo no sabemos si vamos a estar preparados y preparadas para poder resistirlo. Entonces esto puede llegar a ser un buen ejercicio de resistencia y una buena preparación para lo que va a venir que es un endurecimiento de la derecha”, finaliza.
Situación actual
Con toda la condenación internacional al golpe, hasta el cierre de este boletín (septiembre) el gobierno de los Estados Unidos no reconoció formalmente que hubo un golpe en Honduras (lo que implicaría en la suspensión de cualquier tipo de apoyo económico). Transcurridos casi 70 días del golpe, en el inicio de septiembre, anunciaron medidas de presión, como la suspensión de vistos de entradas a miembros y promotores del golpe, además de una “amplia gama de asistencia al gobierno de Honduras” (pero no especifica cual montante y cuales ayudas). Dichas medidas llegan tarde: el gobierno golpista ya ha creado condiciones para que difícilmente se restaure la situación político-institucional, económica y social vigente antes del golpe y han iniciado el proceso electoral mismo con la amenaza de gobiernos de varios países de no reconocieren a los resultados de las elecciones.
Los EEUU continúan insistiendo como la única salida la ratificación del Acuerdo de San José, desconociendo la posición del Frente de resistencia, que exige el fin de la militarización del país y la instalación de una Asamblea Constituyente. La UE continua a negociar tratados de asociación económico con los países de la región y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hizo el 28 de agosto la entrega al Banco Central de Honduras de su cuota-parte de la emisión de Derechos Especiales de Giro, recursos que son puestos a disposición de un gobierno ilegítimo.
Significado del golpe
En la discusión del Encuentro, fue destacado que el golpe si contrapone a todo un proceso político de cambio en la región – con sus conflictos y contradicciones, en algunos países más profundos y en otros menos – que sucede en el sur del continente y que alcanzó la Mesoamérica. En Guatemala y Honduras, gobiernos considerados moderados se aproximaron de los procesos de cambio, más específicamente con el Alba (Alternativa Bolivariana de las Américas). Lo mismo ocurre en El Salvador y Nicaragua.
Tales procesos de cambio apuntan un camino para la derrocada del modelo neoliberal. El gobierno de Zelaya no puede ser considerado de izquierda pero ha promovido políticas públicas hacia la gente, como el aumento del salario mínimo (de 3000 a 5000 lempiras), la garantía de escuela gratis para las niñas y niños, la merienda escolar, planes de asistencia a las personas pobres, a parte de haber detenido el proceso de privatización de activos públicos como la energía eléctrica, los puertos y el sistema de salud.
Zelaya también empezó un proceso de retomada del controle sobre la policía y el ejército, estructuras que tienen vínculos históricos con el narcotráfico y la sustentación a dictaduras militares en la región (con organización de grupos armados que actuaron para desestabilizar procesos en países como Guatemala, El Salvador y Nicaragua). Sin embargo, el punto más fuerte de su acción ha sido la promoción de la consulta que se realizaría el 28 de junio, un proceso que potenciaría la participación ciudadana y social de la población en las determinaciones políticas. Esto representaba el inicio de un proceso de cambio más contundente frente a los poderes oligárquicos.
El golpe es visto también como un alerta a mandatarios de gobiernos de países como Argentina, Brasil, Chile, Paraguay e Uruguay, pero principalmente en Bolivia, Ecuador y Venezuela, sobre cómo los intereses del mercado imperan sobre la gobernabilidad, mismo avalada por los votos. Además, apunta para posibles reacciones a cualquier iniciativa de bloqueo de mercados, que alejan los países de la tradicional subordinación a las políticas de los EUA. Por ejemplo, en el acuerdo con el Alba había la compra de medicamentos de Cuba, lo que significa la reducción de la dependencia de los monopolios multinacionales farmacéuticos (que operan en todos los países de Mesoamérica) y reducción en las vendas de dichos monopolios. Lo mismo sucedería en el caso de alimentos y otros productos. Hay también intereses económicos evidentes en relación al controle de las reservas de petróleo en la región.
Seguir resistiendo e informando
El Frente Nacional contra el Golpe sigue fortaleciéndose con el apoyo de movimientos sociales y personas de todo el mundo. Prepara para el inicio de octubre un Encuentro Internacional de Solidaridad en Honduras.
La Marcha Mundial de las Mujeres ha denunciado el golpe luego en seguida del episodio. Hemos impulsado en los países la organización de actos de protesto contra el golpe y enviado a dos delegadas (una de Brasil y otra de México) para la Misión Internacional de Solidaridad, Observación y Acompañamiento a Honduras. También organizamos una manifestación al final del encuentro de las Américas.
Es importante seguir movilizadas y aprovechar todos los momentos posibles para desvelar el discurso de los golpistas y reforzar la resistencia hondureña, apoyados en la cobertura diaria hecha por los medios alternativos de América Latina.
Algunas recomendaciones de lectura:
América Latina en Movimiento – ¿Golpe de Estado en Honduras? ¿Laboratorio de dictaduras siglo XXI? – varios artículos, disponible en http://alainet.org/publica/
http://www.marchemondiale.org/structure/cn-groupes/ameriques/honduras/golpe092806/entrevista-LO/es
ALAI - http://alainet.org/active/view_docs.php3?serializado=1&pos=0&idioma=esp&OrderBy=dinfo_key&overview=paises&sub=Honduras (la mayor parte de los artículos está en castellano, pero hay muchos textos también en inglés, francés y portugués)
Minga de los movimientos sociales - http://movimientos.org/honduras.php
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Last modified 2009-09-23 01:50 AM
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